martes, 25 de septiembre de 2012

La vie en rose. Si al rosa!



Hay gente que piensa y dice que el rosa es un color femenino, de chicas y cursi. Cuán lejos de la realidad están!

La intención es demostrar que podemos, incluso, abusar de este color sin tener que renunciar a la masculinidad o la femineidad individual de cada uno.

El rosa es un color emocionalmente dulce, agradable y relajado. Demuestra poder y decisión, quizá esos son algunos de los motivos por los que da algo de miedo usarlo en según que ambientes.

Muchas veces, en lugar de pensar y hacer lo que realmente nos apetece, reculamos y creemos usar el razonamiento de terceros para convencernos que, algo que nos gusta, no se puede hacer. Por qué? puede que por falta de costumbre en nuestro entorno pero precisamente eso es lo que nos va a dar un sello propio. La cuestión no es ser diferente a los demás por que sí, sino ser como uno realmente quiere.

Es posible que algunos de los motivos por los que el rosa está encasillado en el género femenino, y remontándonos algo atrás, es que durante la II Guerra Mundial, los nazis, cuando hacían prisioneros a homosexuales, los marcaban con una insignia rosa en forma de triángulo con el vértice hacia abajo. Actualmente, el colectivo gay usa esa insignia con la punta hacia arriba. En oriente, el cine erótico se conoce como "cine rosa". En España, la prensa rosa es la encargada de difundir los devaneos y escarceos de los famosos y la literatura rosa es la destinada a las historias de amor y romance. Además de todo esto, los anuncios y escaparates destinados a los más peques, siempre enfocan el rosa hacia las niñas y el azul hacia los niños.

Al margen de lo anterior escrito, sigo en mi empeño por favorecer al color rosa en un sin fin de variedades. Y como muestra de ello, empezaré por mi casa!



Este es mi sofá. Lo compré en Ka-internacional con una oferta que lanzaron durante pocos días donde si adquirías un mueble te regalaban el textil. Es el modelo Siguenza y el tapizado corresponde a la tela Camarat fresa.Ha sido una de las mejores compras que he hecho! y como no, mi revista Mi Casa siempre encima de la mesita, ésta es de Zara Home. Veréis unas pequeñas manitas en los cantos debido a que tengo una bebita que pronto empezará a caminar.


Y seguiré con un hombre que ha hecho del rosa un color muy masculino, David Tort. Mejor imposible.


 Espacio creado por Laura Ashley y publicado en la revista Mi Casa a la que me considero fan absoluta


Sofá que recuerda al clásico Cadillac Cupe de Ville de 1959. Cuesta unas 4000 Libras esterlinas y lo puedes adquirir en drinkstuff.com


Guitarra Squier Stratocaster Afinity Bullet with trem. 132€ en arteysonido.com


Grand Cordless Phone. De venta en pbteen.com por 99$



Esta es mi reflexión y defensa particular por un color que es uno de mis leitmotiv.








martes, 18 de septiembre de 2012

Restaurando, paso a paso, mi mesita de los años 60



Está de imponente actualidad el estilo retro en lo que a muebles se refiere y es por eso que dedico este post a mi mesita auténtica de los años 60.

Aun tenemos una habitación en casa en proceso de decorar. Me fascina imaginar lo que voy a hacer en ella. En mi mente se va proyectando cada pared, esquina y espacio donde arrojar la creatividad que llevo dentro.

En este nuevo ambiente, he decidido darle unas pinceladas de estilo retro. Me decanto por los años 60-70, por los colores marrones, beiges, azules vintage y ocres, muebles de formas geométricas y algún detalle que otro. Todo esto sin llegar al pop art ni a la psicodélia.

Un movimiento imprescindible para conseguirlo es acudir a encantes o rastrillos y, particularmente en este caso, echar mano a muebles que puedas heredar. Eso es lo que le va a dar un carácter propio e inimitable.

La idea principal es que mi mesita forme parte del rincón de costura que estoy creando pero, como aun queda algún tiempo para eso, siempre puede acabar siendo de otra utilidad.

Habrán personas que ya les gustaba la mesita tal y como era antes de restaurarla pero a mi me apetecía actualizarla y customizarla a mi gusto, además, estaba muy deteriorada.

Vereis que ha quedado completamente mimetizada con la habitación donde va a ser expuesta.

Para aquellos que os animéis a dar un aire nuevo a algún mueble, en las siguientes líneas explicaré como se ha hecho la transformación.



Antes



Ahora






Materiales
- Masilla para madera
- Esmalte al agua satinado blanco
- Esmalte directo al óxido brillante dorado
- Paletina pequeña
- Destornillador
- Rodillo de espuma pequeño
- Cubeta 
- Lija
- Papel de pared
- Cola para papeles pintados (en la caja explica detalladamente su uso)

Procedimiento
1. Desmontar las puertas que vamos a empapelar y quitar las manetas. Dejarlas a un lado.
2. Lijar la superficie del mueble para eliminar los restos de barniz y pasar un trapo para eliminar el polvo resultante.
3. Con la masilla, y ayudándonos con la espátula, rellenamos allí donde estén los desperfectos de la mesa. La masilla tarda 24h en secar, así que tendremos que esperar al dia siguiente para seguir.
4. Con la lija, alisaremos las zonas donde hemos aplicado la masilla y pasaremos un trapo para quitar el polvo.
5. Ponemos un poco de esmalte en la cubeta y ya podemos empezar a pintar! usaremos la paletina para las zonas curvas y desiguales y el rodillo para las de tirada lisa y plana. El mueble va blanco y las puertas doradas.

Las puertas:
Para empapelar las puertas, primero tendréis que preparar la cola siguiendo las instrucciones que hay en la caja.
Mientras reposa la cola, y con las puertas ya pintadas y secadas, cortareis el papel de manera que quede un cuadrado centrado en cada puerta. 
Pasados los min necesarios, con una brocha ancha encoláis el papel que previamente habréis colocado del revés encima de una mesa para poder trabajar mejor.
Y así, centrar los cuadrados de papel y pegarlos! los enmarcará un ribete dorado super bonito.


Si no queréis volver a usar los mismos tiradores podéis comprar otros. En Zara Home hay bastante variedad.

Un besazo!!


lunes, 10 de septiembre de 2012

Como inmortalizar el pie de tu bebé



La idea de este regalo se me ocurrió gracias a dos amigas que pensaron en plasmar las manitas de sus hijos en hojas y regalárselas a la novia más bonita que he visto nunca. Así empezó mi idea.

Decidí que, en lugar de la mano, pondría el pie de mi hija. Desde entonces, mi mente ya no pudo parar de imaginar en los pasos que seguiría hasta conseguir este cuadro de fieltro imperecedero en el tiempo. Luego, ya es la maña que cada uno tenga en los acabados y detalles.

Dejo plasmado cada paso a seguir hasta conseguir el cuadro.

Vereis que es super fácil!!




1. Materiales: vais a necesitar dos piezas en forma de rectángulo de fieltro de diferentes colores. En este caso escogí lila y rosa Las medidas del rosa son 17cmx14cm y del lila un cm más por cada lado. Agujas, alfileres, tijeras, pegamento para ropa, una cartulina del color que os guste, en este caso lila, tempera magenta, hilo rosa, lazo rosa y una tira de puntilla.



2. Dibujáis un corazón, según el tamaño del pie que queráis enmarcar, en un papel cualquiera que os servirá de patrón. Lo recortáis y lo cogéis con alfileres sobre el rectángulo de fieltro rosa y por la parte de dentro, o sea, la que no se verá. Seguidamente, repasáis con lápiz el contorno del corazón para dejarlo marcado.



3. Con la tempera, untais un pincel o un trapito y se lo pasais por el pie al/la peque y lo imprimís en la cartulina. No os preocupeis por que la acuarela es inocua y con un poco de agua se va fácilmente. Recortamos el corazón que habíamos marcado a lápiz.



4. Podemos escoger la puntilla que más nos guste y sujetarla con alfileres para que no se mueva y poder coserla. Para los menos apañaditos con la costura también podéis pegarla con pegamento para ropa.



5. Para elaborar el lazo, que colocaremos en un lateral, sólo tenemos que cortar dos trozos de diferentes larguras y pegar los extremos con pegamento para ropa. Una vez seco, pasamos el rulo grande a través del rulito pequeño y nos quedará el lazo tan bonito que veis a bajo.



6. Ya tenemos todas las partes y sólo hay que montarlo! En la base pondremos el fieltro más grande lila, encima la cartulina con el pie marcado y, seguidamente, la pieza de fieltro rosa enmarcando el pie con el corazón. Yo le he cosido, entre las dos piezas de fieltro, una puntilla en forma de asa para poder colgarlo de una pared pero también podéis idear otra forma de hacerlo. Para fijar la pieza de fieltro rosa he cosido todo el contorno del corazón en forma de puntada y la parte de a bajo cosí unos corazones con mi máquina Singer. También podéis usar un spray adhesivo pero mucho más fiable para que dure es coserlo. Si no tenéis traza con la costura, hacer unas hilvanadas largas con un hilo gordo de un color llamativo con la intención de que se vea.

Que lo disfrutéis!!!