Como algunos ya sabéis, tengo un bebé. Antes, todo el espacio de casa era para mi y mi marido pero desde que llegó la pequeña Mia este espacio se ha ido reduciendo para dar paso a SU espacio :)
Teníamos la cocina llena de botes; uno para los cereales, para la leche, las galletas, los dosificadores de la leche, la babycook etc, así que decidí poner unas estanterías y de este modo que me quedara el mármol de la cocina para lo que se usa propiamente, cocinar.
Es tan fácil hacer que un rincón se convierta en un espacio útil y coqueto que sólo me hará falta una imagen para que veáis cuanta razón tengo.
Asi de bonitas han quedado mis estanterías
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Materiales que necesitareis:
- Faldón ya fruncido para cantos de estanteria
- Tira de velcro con cinta adhesiva. La parte adhesiva se pega a la estantería y la que no lo es se cose al faldón.
- Hilo y aguja
- Botes de cristal Ikea
- Trozos de tela
- Tijeras de troquelar
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6 comentarios:
Buenísima idea! intentaremos ponerlo en práctica el día que yo tenga un bebé o empiezo a buscar un espacio? ;))
Es un rincón práctico que te permite tener un trozo de la cocina recogida!
Por cierto! Esa mariposa me chifla!!!
thanks for reading my post!
Vane! te suena? jejejejejjee es tan bonita que ha pasado de ser algo comestible a algo decorativo ;)
Que bonita idea!!!
Precioso te quedo.
gracias! en construcción la siguiente estanteria que tiene enfrente
bsitos!!!
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